El regreso triunfal a Tokio del almirante Togo

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La entrada a la capital imperial por parte del almirante Togo, “el modesto y tímido héroe” de la Guerra ruso‐japonesa, según “Caras y Caretas” (6 de enero de 1906). La victoria del pequeño imperio sobre una potencia occidental constituyó una gran alegría también para los residentes japoneses en el exterior. Por ej., cuando Makino llegó a Córdoba, los pobladores, que no habían visto japoneses, lo llamaban Coya. El conocimiento fue en aumento con los avatares bélicos, y el mismo Makino invitaba a sus amigos ante cada avance japonés. Y cuando los periódicos anunciaron el triunfo de Port Arthur, amigos y conocidos bebieron festejando hasta el amanecer.